Nooteboom y su dificultad para comprender el “animismo”…

Tumba de Julio Cortázar

   Se llama Cees Nooteboom. Sus obras pueden verlas y descubrirlas en el universo virtual o pueden ir comprando sus libros.

   Actualmente, está presentando uno que realizó como reflexiones sobre las tumbas de grandes escritores. Dicha edición se acompaña con las fotografías de su esposa y se llama “Tumbas de poetas y pensadores”.

  Todo muy bien.

   Pero en una entrevista a una revista cultural decía y se preguntaba lo siguiente:

  “En las tumbas de los que yo llamo escritores latinos siempre hay algo así como altares animistas. …En la de Samuel Beckett, que no es latino pero que para mí pertenece a ese grupo, había un libro. Y uno se pregunta qué piensa la gente.   ¿Qué a  la medianoche sale Beckett y recoge el libro? Y ¿Antonio Machado… ? Delante de su tumba hay un buzón de cartas…¿Qué piensa la gente que le deja las cartas a Machado? ¿Qué las va a leer? (en la de Cortázar dejaron una botella de ajenjo…en la de Vallejo había lápiz y papel y unos guantes de lana…).”

  Acaso Cees debería recordar el epitafio latino “Sit Tibi Terra Levis” que se abreviaba en las lápidas “STTL” y que significa: “Que te sea leve la tierra”.

  Este epitafio supone pues, que los romanos, a pesar de creer en lo que creyesen, sostenían como posibilidad no descartada una vida ultraterrena no muy lejos de la tumba. Que la tierra no sea un peso que te ahogue, que por el contrario,  te sea leve, suave, cómoda en tu largo sueño…

  Sí amigo Nooteboom, es animismo de origen latino que en América se potenció con el arribo de animismos afros.

  No sé por qué Nooteboon se pregunta “¿Qué piensa la gente…”?

  En realidad sí lo sé, el señor Nooteboom es holandés y para tener alguna sensibilidad animista hay que tener algo de sangre latina, de sangre africana, de sangre americana o de un poco de todas ellas.

  Sí, amigo Nooteboom, la gente piensa que el escritor se levantará de la tumba y leerá las cartas y beberá de la botella que le dejen. Pero también debe saber don Nooteboom que el animismo latino piensa que no hace falta levantarse cinematográficamente para leer lo que un admirador deje en la tumba, que basta con que se le deje algo para que el alma conozca y aprecie aquello que se le ha ofrendado, y también debería saber amiguísimo Nooteboom que el animista, el latino, el afro y el americano piensan y sienten que, si de todos modos, ese gran escritor al que se le deja una carta o un regalo, no puede levantarse o no se encuentra allí, de todos modos nosotros como admiradores, como afros o como latinos o como americanos es todo lo que, por lo pronto, podemos hacer y es, para el caso, mucho más hermoso y digno que andar tontamente preguntándose “¿qué piensa esa gente?” ...

Nooteboom, Sra. y el libro que le disparó preguntas tan importantes...

Nota: pueden leer la nota a la que hago referencia en Revista Ñ del 27/08/11