La foto fue
tomada en Medellín, en una revuelta un día de mayo (Raúl Arboleda),
alguien rompe una cámara de seguridad callejera y, de alguna forma, vuelve a
decir algo sobre el hecho de ser observado, de saberse observado o, lo aún
peor, de sospecharse observado.
Dilema o
tragedia que analizaron pensadores como Bentham y Foucault.
Y aquí un
detalle más para ese dilema: la cámara mira al hombre que la intenta destruir y
otra cámara, la del fotógrafo, los mira a ambos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario