domingo, 20 de enero de 2013

Los escritores y los gatos


Monumento en honor a Samuel Johnson


  Hace unos días, nos habíamos quedado con la idea de  hacer una entrada referida a los escritores y los gatos.

  Debido a que un importante número de grandes escritores eligiera acompañarse por ellos, se nos ocurre que acaso existiera una relación misteriosa entre la literatura y los felinos…

  Sea cual fuere la razón o las razones, las dejamos para que nuestros entusiastas lectores reflexionen en la intimidad y nos limitamos a exponer imágenes:



Jorge Luis Borges


Julio Cortázar


Hermann Hesse


Truman Capote


Joyce Carol Oates


Mark Twain


Edward Gorey


Jean Cocteau


Stephen King


Jean Pual Sartre


Jack Kerouac


Ernest Hemingway

William S. Burroughs


Colette


Raymond Chandler




5 comentarios:

  1. No creo que sea algo propio de los escritores, sino, mas bien, del hombre intelectual. Siempre he indagado y las personas que tienden a ser mas mentales, prefieren la compañía gatuna. En cambio quienes son más "sencillos" en ese aspecto, definitivamente se vuelcan por la compañía canina, repudiando a los felinos. Los canes son lambizcones, fáciles para cualquier persona, no se requiere habilidad ni personalidad para agradarle a un perro, no tienen misterio, sólo hay que recurrir a un par de fricciones en su pelaje, y se tiene al animal comiendo de la mano (de cualquier mano). Los gatos en cambio, son reacios por definición, soberbios, interesados, distantes, egoístas, y se requiere de muchísima personalidad para captar su interés; el gato no sigue órdenes en su estado natural, no viene cuando se lo llama, lejos está de ser sumiso y supeditarse a su "dueño" (nunca peor utilizada dicha definición). Quien quiera ganarse su aprecio tiene que comprender que está tratando con seres que no lo endiosarán, al contrario. Se requiere mucha personalidad y ganar el respeto de la critatura en base a real dominio, y no en base a mediocres caricias y sentimentalismos simples.

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  2. Obviamente, no tengo que decir (creo), que es infinitamente más gratificante lograr que un gato lo quiera a uno, que lo haga un perro.

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  3. Aprecio tus comentarios amigo Abelrock, y me quedo pensando en ellos. Veré si logro hacer una colección de escritores con sus perros, aunque me parece que tendré que considerar esa relación entre gatos e intelectuales...

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. Espero la colección perruna. Si mi teoría es cierta, te costará mucho más encontrar dichas fotos, o habrán muchas menos en comparación.

    Un abrazo grande Pablo, sos un genio.

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