martes, 29 de noviembre de 2016

¡Face, face, face!



 Leo en referencia al facebook y al ocaso de la privacidad como valor: 

“… La encuesta, que fue dada a conocer en un portal de noticias de la ciudad de Dallas (http://www.hoydallas.com/), revelaba-entre otras cosas- que gran parte de las poses a las que los padres sometían a sus pequeños hijos para ser retratados, no las harían con ellos mismos. Mostrarse en traje de baño, filmar un berrinche o captar el momento del sueño no son precisamente escenas en las que los adultos se sienten especialmente cómodos, pero entonces ¿por qué sometían a sus hijos a protagonizarlas? La premisa bíblica de no hacer a los demás lo que no se quiere para sí mismo, brillaba por su ausencia…”


Ingrid Sarchman


lunes, 28 de noviembre de 2016

Adiós a los hombres épicos…






  Todo el fin de semana, los sitios de noticias hablaron de la partida de Fidel...

 Quizás, 30 años después, alguien le escriba unos versos como estos que Benedetti le dedicara al “Che”


Che 1997

Lo han cubierto/ de afiches de pancartas
de voces en los muros
de agravios retroactivos
de honores a destiempo

lo han transformado en pieza de consumo
en memoria trivial
en ayer sin retorno
en rabia embalsamada

han decidido usarlo como epílogo
como última thule de la inocencia vana
como añejo arquetipo de santo o satanás

y quizás han resuelto que la única forma
de desprenderse de él
o dejarlo al garete
es vaciarlo de lumbre
convertirlo en un héroe
de mármol o de yeso
y por lo tanto inmóvil
o mejor como mito
o silueta o fantasma
del pasado pisado

sin embargo los ojos incerrables del che
miran como si no pudieran no mirar
asombrados tal vez de que el mundo no entienda
que treinta años después sigue bregando
dulce y tenaz por la dicha del hombre.


Mario Benedetti




sábado, 19 de noviembre de 2016

Nüremberg, los oídos y los ojos…

 Descubro, leyendo una vieja nota periodística, que nuestra escritora Victoria Ocampo fue invitada a presenciar el juicio de Nüremberg

 Percibe que lo que se está diciendo tiene menos hondura que lo que ve…


“Escucho estos alegatos, estas preguntas, estas respuestas como si eso –lo advierto perfectamente- no fuera lo más importante. El espectáculo impresiona casi más  a mis ojos que a mis oídos. En esta ópera, los oídos tienen casi menos importancia que los ojos. Lo que se dice en esta sala, ya podrán comunicármelo los diarios, repetírmelo los amigos. Pero nunca podrán trasmitirme lo que mis propios ojos recogen en los rostros, en los gestos, en las actitudes…”





lunes, 14 de noviembre de 2016

Descubrir a un poeta, José María Álvarez...




  Siempre, esa felicidad, esa sensación de haberle ganado un instante al tiempo,  al descubrir un poeta…


Argent vivo

                            ¡Qué vida más tranquila parece llevar mi familia!
                                                                                                 -pensó Gregorio
                                                                                                          Franz Kafka

                                                                  La voluntad y los apetitos... ah!
                                                                                                     Edmund Burke
¿Lo recuerdas? Tuvimos
la Luna en la palma de la mano.
Nunca otra vez la música
de aquel tambalillo de la playa
volverá a hacernos bailar,
ni, sin que nosotros lo escuchemos,
a crujir el mundo volverá.
Volverá tu marido, no es mal tipo,
en su jardín tu aburrimiento a colgar,
y el calorcillo que alumbra entre tus muslos
¿a quién llamará?
Quizá otros brazos y otros besos
profundamente sentirás,
y tu marido y yo quizá acabemos
bebiendo solitarios en un bar,
haciéndonos amigos; como es lógico
evocarte nos unirá.
Pero recuerda, como yo te he leído a Scott Fitzgerald
nadie te lo leerá.

José María Álvarez



Y para recordar la intertextualidad:


Volverán las oscuras golondrinas

Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y otra vez con el ala a sus cristales,
jugando llamarán;
pero aquellas que el vuelo refrenaban
tu hermosura y mi dicha al contemplar;
aquellas que aprendieron nuestros nombres,
esas... ¡no volverán!
Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar,
y otra vez a la tarde, aun mas hermosas,
sus flores abrirán;
pero aquellas cuajadas de rocío,
cuyas gotas mirábamos temblar
y caer, como lágrimas del día...
esas... ¡no volverán!
Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar;
 tu corazón, de su profundo sueño
tal vez despertará;

pero mudo y absorto y de rodillas
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido... desengáñate,
¡así no te querrán!
 
Gustavo Adolfo Becquer


lunes, 7 de noviembre de 2016

A propósito de “Falcó”, la última novela de Pérez-Reverte…





 Dice el amigo Fabrizio Zotta, que Pérez-Reverte está decepcionado de los humanos, de la mayoría de ellos, y por ende, ahora sus héroes (o sus protagonistas), son seres decepcionantes.

 Es muy probable…

 Tendremos que leer “Falcó”, su última novela.

 Acaso tengan razón…ambos...


http://www.lacapitalmdp.com/los-heroes-de-perez-reverte/









domingo, 6 de noviembre de 2016

Eros, según Robert Graves, en otra mirada...


A propósito de lo publicado el sábado 29/10:

“Era un niño indómito”
¡Qué bien lo dices Robert!
Acaso aún lo es.
Me gusta imaginar que los dioses no se mueren…
Un niño
que no respeta edad, ni condición,
ni estructura humana alguna.
Tal vez la Guerra de Troya
no fue una guerra
y sí, una revolución
y es por ello que fracasan los arqueólogos
rastreando los vestigios de una batalla
que no existió jamás.
Un niño con sus doradas alas,
con sus flechas arbitrarias,
con sus antorchas imprudentes
que andaba y anda
haciendo fuegos
donde debería haber sosiego o prudencia.

Algunas tardes tristes
suplicamos su visita,
nos dolemos
por su ausencia…"


 P.S.