sábado, 26 de abril de 2025

La selfie con el papa muerto…

 


 Cuando la telefonía móvil sumó, mejoró y amplió su capacidad para tomar imágenes, la selfie se convirtió en pasión.

 Había habido, con cámaras analógicas, algunos precursores de la “autofoto”, no existía la palabra selfie, pero de esos precursores, podemos hablar en otro momento.

 Con la posibilidad de acceso a un teléfono móvil y, por ende, con la posibilidad de auto tomarse imágenes que traen esos móviles, los ciudadanos del mundo no hacen más que retratar y retratarse solo con el fin de compartir esas imágenes con un puñado de conocidos.

 Desde hace tiempo que solo existe el disfrute de estar en un lugar en tanto y en cuanto se pueda mostrar que estamos en ese lugar. El gozo de ver algo, se transformó en el gozo de mostrar que estamos viendo algo (aunque en rigor, no lo estamos viendo con atención).

 No miramos tanto la obra de arte, le damos la espalda para mostrar que estamos cerca de ella.

 La tentación de hacer esto, está expoliada además por la posibilidad de compartir esa misma imagen con otros, al instante y en “tiempo real”.

 El disfrute completo de la realidad se pierde. No se mira un paisaje si no es virtud de poder presumir que se está allí; no se aprecia una obra de arte si no es pensando en que, en el acto, se puede comunicar que estamos frente a ella; no se experimenta un momento histórico, solemne, digno de respeto, si no es para presumir que lo estamos “viviendo”…



lunes, 21 de abril de 2025

Cónclave...

 


 Alguien muy querible, me conminó hace unas semanas a ver este film. Muy apasionante, pero muy apasionante para los que conocen el paño. Podrán comparar lo cierto con lo ficcional. Para quienes no conocen el paño, podría tratarse de un film entretenido y muy disfrutable.

 Ese ser querible me compartía, además y en especial, su disfrute por la vestimenta, la ornamentación, la formalidad, el ritual.

 Es que las liturgias son estéticas, abrumadoramente estéticas. Una ordenación sacerdotal, un Rosh Hashaná y Yom Kipur, la oración hacia la Meca, un cónclave papal, una corrida de toros…

 Acaso algunas o todas, tan correctas como incorrectas, todo depende de cada moral, el caso no importa, con contenido estético siempre, solemnes, bellas, sacrificiales, todas, todas con muerte y resurrección de algún modo y de algún tipo.

 El film “Cónclave” es de 2024, premonitorio.

 La actuación, la fotografía, la historia, la trama, todo magnífico. La liturgia: lo mejor…

 

Dirigió Edward Berger sobre historia de Peter Straughan, basada en la novela homónima de Robert Harris, publicada en 2016. Encarnan Ralph Fiennes, Stanley Tucci, John Lithgow, Lucian Msamati, Carlos Diehz, Sergio Castellitto e Isabella Rossellini.

 



sábado, 19 de abril de 2025

Beetlejuice: no otra vez...

 


 Los co-presidentes y CEOs de Warner Bros. Pictures, Mike De Luca y Pam Abdy han dicho la frase que, desde este espacio, no queríamos escuchar: “…las secuelas son inminentes”. Estaban hablando de "Minecraft" y de "Beetlejuice"… Esta última es la que más nos fastidia, la otra no merece análisis. Sí, puñado de lectores entusiastas de este blog: harán una tercera "Beetlejuice"

 Comercialmente tendrá su rédito. El mundo es grande y hay público para todo. No estuvo mal la segunda. Grandes actores y actrices. Pero la magia, la magia de lo nuevo ya no estaba y menos estará en una tercera entrega.

 Siempre insistimos aquí: vayamos por magias nuevas, por nuevas originalidades, lo que fue ya estuvo bien así…




lunes, 14 de abril de 2025

Oscar, nueva categoría…

  Ya vimos, en este espacio, que si hay algo que caracteriza a “La Academia Cinematográfica” es su actual desprestigio.

 Cualquiera puede probar que los jurados ya ni siquiera miran los films que votan y premian.

 No obstante la decadencia, sumarán una nueva categoría titulada: Logro en Diseño de Acrobacias” que, por cierto y muy merecidamente no es otra cosa que premiar a los dobles de riesgo.

 Merecidísimo.

 Eso sí, a partir del 2028.

 No antes, no sabemos por qué, pero no antes.

 Se esperaron 100 años, esperaremos un poco más, especialmente sus protagonistas…


  



















domingo, 13 de abril de 2025

Piglia o el recuerdo de los libros…

 Evocamos esa frase iluminadora de Ricardo Piglia: “El recuerdo de los libros está acompañado de la situación en que fueron leídos.”

 Frase que deriva de la idea prodigiosa de que uno, puede no recordar el contenido del libro pero sí, acaso, la situación en que se dio con él. Y ese recuerdo nos da la pauta de cuán importante ha sido o es ese libro para nosotros.

 En fin, que no damos más interpretaciones porque el fragmento de su diálogo se disfruta por sí mismo:

“La peste fue el primer libro que leí con conciencia, digamos, literaria. Tengo muy clara la escena. Porque íbamos caminando por la calle y enfrente había un muro, y tengo esa imagen muy nítida porque entonces ella me hace la pregunta. Teníamos quince, dieciséis años. Yo cursaba el secundario y no estaba interesado mayormente en la cultura, jugaba al billar, qué sé yo, pero estaba esta chica que venía de una familia anarquista y era abanderada y tenía esa tradición cultural de los anarquistas. Íbamos caminando por esa calle cuando ella me preguntó qué estaba leyendo. Yo no estaba leyendo nada, pero recordé un libro que había visto expuesto en una librería y dije su título. Era La peste, de Camus. Pero entonces ella me lo pide prestado. Ese día lo compré, lo leí esa noche, lo arruiné un poco para que pareciese usado y se lo presté. Los libros importantes de mi vida están conectados con escenas, situaciones. Si uno recuerda la situación (dónde lo compró, dónde lo leyó), aunque no recuerde bien el contenido, quiere decir que ese libro fue muy importante, no en general sino para uno. El recuerdo de los libros está acompañado de la situación en que fueron leídos.”

 

Ricardo Piglia en diálogo con Ignacio Bajter y Ana Inés Larre Borges

Revista de la Biblioteca Nacional, 2011.

 


sábado, 12 de abril de 2025

“Parténope, tan lejos de mi tierra.”

 



  El verso del título de esta entrada es del glorioso Garcilaso de la Vega. Para lo de hoy, acaso no importe, pero siempre que alguien recuerda a la sirena Parténope, viene a la mente ese verso que me resulta maravilloso: “Parténope, tan lejos de mi tierra.”.

 Un día recomendé a un amigo el film de Paolo Sorrentino, “La grande belleza” (2013). Me afirma hasta hoy, que le resulta la mejor película que vio en su vida. Exagera sin duda, pero me halaga dar algo a alguien y que le parezca “lo mejor de su vida”.

 Vimos el último film de Sorrentino: “Parthenope”.

 Las críticas van de extremo a extremo, es un buen síntoma para un film.

 En este espacio, tratando de eludirnos, si fuese posible por un instante, del magnífico exceso de belleza que nos depara la protagonista, diríamos que aquí sí hay una película en serio. Diríamos y decimos que esto es cine, que aquí hay algo importante, serio, que da que hablar y analizar. Una narrativa cinematográfica con mundo propio profundo, con personajes que nos interpelan y nos sorprenden.

 Esto no es cine en función de lo comercial y el puro entretenimiento, esto es cine le guste a quien le guste y le pese a quien le pese.


 Dirige y guiona Sorrentino, protagonizan Celeste Dalla Porta, a la que Stefania Sandrelli, Gary Oldman, Silvio Orlando, Luisa Ranieri, Peppe Lanzetta e Isabella Ferrari. (2024).

miércoles, 2 de abril de 2025

2 de abril

 



 Los días feriados suelen ser alegres. Hay algunos tristes. De todos los tristes, éste es el más triste...

 

 

"De la mañana a la noche.

De la noche a la mañana.

En grandes olas azules

y encajes de espumas blancas,

te va llegando el saludo

permanente de la Patria.

Ay, hermanita perdida,

hermanita: Vuelve a casa.

 

Amarillentos papeles

te pintan con otra laya.

Pero son veinte millones

que te llamamos: Hermana…

Sobre las aguas australes

planean gaviotas blancas.

Dura piedra enternecida

por la sagrada esperanza.

Ay, Hermanita perdida.

Hermanita: Vuelve a casa.

 

Malvinas. Tierra cautiva

de un rubio tiempo pirata.

Patagonia te suspira.

Toda la pampa te llama.

Seguirán las mil banderas

del mar, azules y blancas.

Pero queremos ver una

sobre tus piedras clavada.

Para llenarte de criollos.

Para curtirte la cara

hasta que logres el gesto

tradicional de la Patria.

 

¡Ay, Hermanita perdida.

Hermanita: Vuelve a casa...!"

 

Atahualpa Yupanqui