Dicen
que la caza es mejor que la presa, que el perfume de la flor más importante que
la flor, que la ascensión enseña más que la cima…
Trintignant fue
ese actor tan particular, personalísimo y emblemático que fuera también piloto
de carreras ganador del “Gran Premio de
Mónaco” y “Las 24 hs. Le Mans”,
director cinematográfico también entre otras tantas cosas…
Dicen de él o, mejor dicho, me cuenta un amigo
que siendo aficionado a la fotografía Jean-Louis
“tomaba” fotos con una Nikon sin
rollo puesto que el resultado no importaba…
Había
concebido el gusto por la realización por sobre el producto final, el gozo del
momento creador muy por encima de mostrar los logros o hacerlos para gustar…
Dos
pulgares arriba, extraña pero memorable actitud.
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