lunes, 31 de mayo de 2021

Lo primero es la Luna. Día I de nuestra Semana de “Retroficción” en “La Comedía Terminó”…

  Damos inicio a esta semana con las infaltables referencias a nuestro satélite natural, Selene por siempre…


Para comenzar, “El viaje a la Luna”

 Es ese film que se ha visto poco pero se recuerda la imagen de la Luna con la nave en su ojo, no es otro que “Le voyage dans la Lune”, “El viaje a la Luna”

 


 Fue en Francia donde Georges Meliés se inventaría a sí mismo (acaso sin saberlo) como el pionero y, si se quiere creador del género Ciencia Ficción cinematográficamente hablando. En 1902 ya tenía el guión y el dinero para apostarlo a todo o nada: 10000 francos que claramente era una suma importante por entonces…

 Ese dinerillo se invirtió en la construcción de decorados, la confección de trajes selenitas (diseñados por el mismo Meliés), acróbatas del Follies Bergére y bailarines del teatro Chátelet, sin faltar coristas que hicieron de extras.

 Dijo, por entonces, que solo hizo una hilación de efectos especiales basado en las novelas “De la Tierra a  la Luna” de Julio Verne y “Los primeros hombres en la Luna” de H.G. Wells y evidentemente es cierto.

 

 El Club de Astronomía decide enviar una expedición al satélite natural de la Tierra, serán cinco que conocerán a la Diosa de la Luna y sus castigos, a los selenitas, las profundidades del Océano y la gloria de París… Todo eso en apenas ocho minutos llenos de trucos que suplantaban los desconocidos primeros planos y los movimientos de la cámara. A falta de todo aquello, Meliés divierte a quien la mire con sobreimpresiones, transparencias, desapariciones y etcéteras.

 Dicen quienes saben de  buen cine que Meliés inventó la “simultaneidad de puntos de vista” con este film antiguo y ya mitológico.

 Todo esto le valió el triunfo en Francia y el robo en EE.UU. ya que jamás percibió un dólar por su logro: un tal Edison realizó sin permiso legal alguno, una copia y se hizo rico a costa de Meliés… Bribón, estadounidense bribón…




Boceto de Meliés para escenas submarinas

Para seguir: “Una mujer en la Luna”




 Unas décadas después, en 1928 , el controvertido Fritz Lang llevará una dama hasta nuestro astro más cercano: “Frau um Mond” o “Una mujer en la Luna” que irá desde la misma Alemania

 Según historia de Tea von Harbor con aportes del propio Lang, nadie le cree a un profesor llamado Mansfeld que en la Luna existe oro… Nadie le cree hasta que alguien le cree, el ingeniero Helius logra reunir a los cinco hombres más poderosos del mundo para que costeen la expedición. Hay robo de planos y chantaje antes de partir, además nos enteramos de que también serán cinco los tripulantes contando a la prometida de uno de ellos. ¿Quién no invitaría a su novia a la Luna si pudiese ir? De hecho, seguramente, muchos enamorados prometieron la Luna y luego no cumplieron… Una vez allá… Puede haber oro y puede faltar oxígeno, también puede haber amor…







Y para terminar por hoy: “Con destino la Luna”

 1950 será el año de estreno de “Destination Moon”, “Con destino la Luna” dirigía por Irving Pichel.



 Se parece a algunas historias reales que luego se vivirán en la NASA: luego de algunos intentos fallidos, un General y un Doctor consiguen la autorización y los medios para crear un cohete que logre alunizar. Están en ello, haciendo pruebas que aún no cuentan con el permiso oficial de despegue cuando la tripulación hace caso omiso y parte nomás hacia el satélite…

 Como si fuera poco, en el film se puede ver una caricatura de Walter Lantz, si el creador de El pájaro loco, en este caso con una animación explicativa que tiene sus razones en el desarrollo de la trama.

 Los analistas nos dicen que es una película muy documentada, tratando de minimizar lo ficcional. Si bien hoy la entienden como un film superado, no dejan de destacar que fue una película precursora de la tan controvertida y costosa “carrera espacial”…




  Y mañana continuamos…


No hay comentarios:

Publicar un comentario