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Cuando
leí La Iliada constaté una verdad tan simple como pura: a los
muertos hay que llorarlos y eso está bien…
El mundo
higienista de hoy nos da consejos sobre el duelo, sobre cómo llevarlo y hasta cuánto
tiempo promedio debe durar dependiendo de la familiaridad o cercanía del
fallecido.
No me
importa nada todo eso…
Murió un
periodista magnífico.
Su
carrera fue de 42 años de puro periodismo deportivo del mejor.
Yo lo
disfruté infinitas noches, porque él participaba en un programa radial nocturno
llamado con un término futbolístico: “El Alargue”.
Durante
18 años no durmió por las noches…
No durmió
por las noches porque hacía “El Alargue”.
“El Alargue”, es un programa
que continuará sin él, pero con él de alguna manera…
El
espíritu del programa era tan claro como esa especie de fatalidad o beneficio deportivo
que supone que el partido de fútbol se extienda más de la cuenta habitual.
En las
definiciones de los campeonatos existe la posibilidad de extender el tiempo del
partido, se alarga y se alarga para llegar a una definición que puede ser tan
grata como fatal por así decirlo…
Para los
oyentes nocturnos,"El Alargue" es esa réplica radiofónica de alargar el día más
de la cuenta. Tiene algo delictivo escuchar la radio por la noche: significa
que no estamos durmiendo de la manera que el sistema totalitario del trabajo
necesita para que rindamos eficientemente al día siguiente…
Baffa estuvo
en "El Alargue" casi un veintena de años…
Lamento
que los dioses no le otorgaran un “alargue” para su vida y tuviera que partir
con sus 61 años a cuestas…
Te lloro
amigo Baffa…
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