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El álbum de
figuritas que grandes y chicos pueden comprar con motivo del Campeonato Mundial
de Fútbol Rusia 2018, acaba con los dos pilares mágicos que suponía coleccionar
figuritas, a saber:
1. La figurita difícil.
2.
El
premio por completar el álbum.
1. La
figurita
difícil lo era todo, no importaba si se trataba de una leyenda urbana o
de una estrategia de los editores de figuritas. La realidad era que había una
figurita que raramente aparecía. Y ahí se agregaba un plus al juego de la
infancia, al mundo de la escuela, a los años de oro, todo ese mundo que cuando
llegaba el campeonato mundial suponía canjear, jugar y ganar, perder, comprar,
buscar, soñar con figuritas, portarse muy bien para que los padres trajeran,
luego de su jornada laboral, no un sobre sino tres o cuatro sobres de
figuritas. Ese plus, el de la “figurita difícil” incluía además que alguien la conseguía y
podía atesorarla y completar el álbum o podía canjearla por muchas, sólo Dios
sabe por cuántas otras figuritas.
2. El
otro pilar lo constituía el premio por completar el álbum. Uno mandaba, si
quería, su álbum por correo y le enviaban una pelota, tratándose de un niño, o
una muñeca si se trataba de una niña… Simple, sin muchos parámetros más…
La
nueva edición de figuritas del mundial en estas tierras, no cuenta con figurita
difícil, así lo anuncian sus creadores. Por ende, si completas el álbum, completas el álbum, eso es todo.
Acabaron
con los dos parámetros sagrados de la niñez con respecto a las figuritas.
“La
comedia terminó”…
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